Domingo 9 de octubre, después de hacer el día anterior, la senda del oso, los chicos quisieron probar un descenso nuevo para ellos, el de Bimenes. De nuevo un día magnífico, en contra del hombre del tiempo, que al realizarse en un bosque, no nos quemamos.
Por la mañana, se dedicaron a conocer el circuito, Mario, experto en ello, junto con Irene y Luis probaron el de los mayores. Después de alguna caída, solo Irene quiso competir junto con Mario y los corredores grandes. Por cierto, con los colores de la escuela corrían dos mayores, Guti y Luis J., éste ganando en su categoría.
En cuanto a los pequeños, era un circuito lógicamente más corto, pero duro para ellos. A pesar de más caídas y alguna que otra voltereta, los ánimos no caían y decicieron competir por la tarde.
Los nervios iban en aumento, dado que primero se celebró el descenso de todas las categorías superiores, y en la segunda manga, parece ser que algunos corredores se dedicaron a deleitar al público con unas impresionantes caídas, sin más consecuencia, que eso. Diversión y aplausos del respetable, y algún que otro susto, al ver venir la bicicleta volando hacia tí (verdad Rodrigo).
Al final, buenas sensaciones y buenos resultados (ver una de las entradas anteriores).
Hemos preparado unas fotos, difíciles de tomar algunas por la velocidad, y les hemos puesto una música relajante, que adrenalina ya soltamos ese día. Lo digo por los padres.
Si lo quereis ver en grande pincha aqui
No hay comentarios:
Publicar un comentario