Segundo
capítulo del tríptico asturiano para nuestr@s campeones y segunda prueba de
carretera esta semana. Día festivo para todos, así que muchos padres y
familiares de los chicos se acercaron a disfrutar de estos grandes de los
pedales. El lugar Las Caldas, y el organizador la Peña Ciclista Manzanillo, que
ponía en marcha el I Trofeo Ciclista de Las Caldas. Esperemos que no sea el último,
al igual que todos los primeros premios a los que esta temporada estamos
asistiendo, ya que para estos pequeños y pequeñas es el futuro de este deporte
y sin carreras para ellos mal vamos.
La expedición
Coque esta vez no tuvo que madrugar pues la carrera era a las cinco de la
tarde, y el lugar dista de Gijón unos cuarenta kilómetros por buena carretera,
por lo que la noche anterior muchos aprovecharon para disfrutar de la noche de
Gijón y sus Fuegos Artificiales. No dejan de ser niñ@s o jóvenes, como queramos
llamarlos, así que la vida monacal para los monjes no para críos que tienen que
disfrutar de la vida. Partíamos con buenas sensaciones tras las carreras del
lunes en Albandi, y los chicos con ganas de bici y competición.
El
circuito para los Alevines e Infantiles partía de Cases, junto al restaurante
sidrería la Senda y de espaldas al rio Nalón. Comenzaban con una carretera
estrecha bordeada de casas y huertos y dejando siempre de espaldas el río. A apenas
unos trescientos metros se topaban con una rotonda, que no hacían pues cogían
la primera salida a izquierda. Después comenzaba una pequeña subida sin
problemas para ellos, pues no dejaba de ser una inclinación producto de un
puente sobre una línea de tren. Tras pasar el puente comenzaba el descenso más
pronunciado y largo del día, en busca del puente que pasa por encima del Nalón.
Ahí llaneaba el terreno durante unos cuatrocientos cincuenta metros hasta una
rotonda, ya en Las Caldas, y esta vez sí la hacían para volver sobre sus pasos,
o rodadas, por el otro carril en busca
de la pendiente más exigente de la jornada. Dicha pendiente apenas tenía cien
metros, pero qué cien metros, para que os hagáis una idea aumentad una rampa de
garaje hasta esa distancia. Pasada esa dificultad tan sólo restaban unos cincuenta metros para la línea
de meta. El público se agolpaba en el tramo de llegada y cómo no en la
pendiente. Este circuito fue sufriendo variaciones para las categoría
inferiores, así como los promesas partían del puente sobre las vías que los
infantiles pasaban en el otro sentido tras la primera rotonda, los
Principiantes partían de Las Caldas y al llegar a meta dejaban a un lado la
empinada cuesta para subir por donde los mayores bajaban y lanzarse después
hacia meta.
Los
siguientes de la expedición en darle a los pedales iban a ser los cuatro
fantásticos, pero esta vez se han quedado reducidos a tres, por un pequeño
accidente de Selena Barreiro de camino a un entrenamiento. Como viene siendo la
tónica en esta categoría, Promesas A, salida rápida y decisiva por parte de dos
de nuestros muchachos, David Ordiz y Andrea Álvarez; y a la par de ellos, cómo
no, Raúl Rodríguez del C.C. Colloto. Gabriel, fiel a su temporada, salida en
mitad de pelotón en sexta posición. En meta Raúl superaba a nuestros chicos que
se tenían que conformar con un segundo puesto para David y un tercero para
Andrea, mientras que Gabri cruzaba meta en séptima posición intentando dar caza
a los que llevaba delante.
Por
motivos organizativos se cambió el orden de las categorías y pasaron a correr
antes que los Principiantes los Alevines A. Como es sabido en esta categoría no
tenemos participación, por lo que muchos adultos de la expedición aprovecharon
para tomar unos refrigerios y charlar tranquilamente guardando la voz para
momentos más tarde.
Nuevamente
la expedición Coque tensó las gargantas, unos al inicio de la subida, otros al
final de ella y los más numerosos los de meta, se desgañitaron al dar ánimos a
nuestros Principiantes. En los primeros los B, Lydia se mantuvo en el pelotón incapaz
de soportar el ritmo impuesto por Cristina Menéndez de Asturbike, Hugo de la
Calle de Manzanillo y Álvaro Rebollar del Viella, quienes pronto se fueron del
resto de los chicos. En la subida el pelotón se rompió en pedazos dejando a
Lydia en cabeza de él, en reñida disputa por el cuarto puesto con Ángel Ramos
de la E.C. Viella. En meta nuestra chica terminó por imponerse a Ángel y se
llevó el cuarto puesto, los tres de delante habían estado intratables.
Para
Principiantes A tras los últimos resultados muchos éramos los que esperábamos
que Guille se sacudiera de su cabeza el mantra que arrastra “Es que estos
corren mucho”. La carrera comenzó con una calma que presagiaba tormenta y sólo
tres chicos perdían contacto con el grupo. El pelotón según se aproximaba a las
primeras rampas iba acelerando progresivamente el ritmo, mientras las miradas
entre ellos eran continuas. Comenzaba la subida y sin demarra, sólo a ritmo,
Alejandro Suárez de la E.C. Viella ponía
tierra de por medio con el grupo. Tímidamente Guille se lanzó en busca
del chico y al verse sólo en cabeza su
primer impulso fue echar la vista para atrás, tras darse cuenta que viajaba con unos metros de ventaja aumentó
el ritmo, pero no de manera convincente pues no hacía más que mirar hacia
atrás, seguía sin creer en sus posibilidades. En el grupo Samuel Kamikaze se
colocaba en primera posición vigilante, pero al ver que por sus laterales
Samuel Fernández de la E.C. Viella y Adrián Álvarez del Manzanillo se
emparejaban e imponían ritmo de caza aceleró el ritmo tras ellos, y al final de
la subida se merendaban a Guille y a Alejandro. A meta llegaban Adrián y
nuestro Samuel en un duro sprint, dando vencedor a Adrián. Guille en un “no me
atrevo a dar más” terminó más o menos en las mismas posiciones de siempre, sexto.
Resumen de la carrera nuevo pódium para Samuel y tímido intento de Guille de
romper el bloqueo mental.
Nuevo
descanso para las gargantas de la expedición, esta vez con los Alevines B.
Calma total no, pues los nervios y la intriga para los Infantiles era grande. Para
los chicos de la parte trasera de las pruebas, Martín Fernández y Luis Revilla,
la intriga venía de la velocidad de comienzo tras el pistoletazo de salida, ¿se
saldría por fin con calma? Y para los de la zona delantera la intriga cambiaba,
la preocupación de Irene Barreiro era saber hasta dónde le permitirían llegar
sus fuerzas, y para David Álvarez, esta vez sin voces en su cabeza, ¿cómo tendré
las piernas tras lo del lunes?
Salida
lenta en Infantiles y alegría en la mayoría de ellos que tras las primeras
pedaladas no paraban de decirse unos a otros: “¿Es que estamos enfermos? No me
lo puedo creer” Pronto en la primera vuelta comenzaron las penurias para nuestros
muchachos. Grupo compacto y en calma por la subida en busca del primer paso por
meta, DA pasaba en cabeza, Irene metida en el grupo cómodamente, Martín
comenzaba a sufrir y perdía un par de metros con el pelotón y a Luis en el
comienzo de ella se le salía la cadena, con tan mala fortuna que se quedaba
trabada. Recibió la ayuda de los entrenadores de otros equipos y de su padre,
pero cuando el problema fue resuelto el
chico perdía más de media vuelta con el pelotón. A pesar de ello Luis no se
rindió, y a sabiendas de que la carrera estaba totalmente terminada para él no
se rindió y sacó todo el coraje y la capacidad de sufrimiento de la que
dispone, para en solitario terminar la carrera. Pese a la mala suerte
grandísima carrera la de Luis. Antiguamente en las carreras había premio a la
desgracia, este premio sería para él sin duda.
En
la siguiente vuelta, de regreso desde Las Caldas, DA ponía tensión en la
carrera y lanzaba un demarrage en solitario, aunque esa no fue su intención, su
intención era la fuga en compañía. Este arreón terminó por dejar atrás a Martín,
quien no fue capaz de entrar nuevamente en el pelotón y se quedó como Luis, en
solitario para el resto de la prueba. Irene sufría para mantener la cola del
grupo y presagiaba pocas vueltas a cola de él. En la bajada de la segunda
vuelta DA persistía en su intento, pero por detrás el grupo reaccionaba totalmente
estirado y comandado por los chicos del Manzanillo. En el siguiente regreso de
Las Caldas DA estaba reincorporado en un ya reducido grupo de quince chicos, a
los que seguía con unos metros de retraso dando chepazos Irene Barreiro. Pronto
los chicos del Manzanillo tensaron la prueba y consiguieron partir el grupo en
dos, dejando a DA cortado en un grupo
trasero y a Irene descolgada ya sin posibilidades de reacción. DA ya se había
dado cuenta que las piernas no querían dar mucho de sí ese día. En la expedición
Coque los ánimos se tornaban oscuros. En cabeza los Manzanillos se miraban,
miraban para atrás y no se lo creían ¡habían descolgado a David! Hablaron entre
ellos volvieron a mirar hacia atrás y sí, estaba descolgado, pero no se rendía
y se aproximaba a ritmo continuado. Rápidamente todos ellos se ponían a trabajar
para impedir la reagrupación. Al paso por la cima DA recibía los ánimos extra
de sus antiguos compañeros de batallas en temporadas anteriores, pues se
encontraban viendo la prueba Richard Brum y Laura Álvarez del Santi Pérez. Después
de varias vueltas de oscuridad total un rayo de luz rompió la oscuridad y la
luz apareció en la expedición Coque. DA entraba en el grupo cabecero. Los demás
miembros del equipo seguían en la oscuridad pero en continua lucha contra ellos
y su cabeza que les decía basta ya, mas todos ellos decían no, sigo en carrera.
Tras
la reagrupación por un momento llegó la calma a la cabeza de la prueba,
faltaban tres vueltas y comenzaba otra carrera con todos los chicos machacados
por el esfuerzo. Al paso por antepenúltima vez por la subida Pelayo Alonso del
C.C.Colloto se lanzaba para arriba en solitario, al poco Yago Segovia, que corría
en casa, demostraba ser el único en tener piernas en ese momento para lanzarse
a por él y se zafaba del grupo. Entre los dos chicos hicieron camino, gracias
al trabajo de los compañeros de Yago que controlaban en el pelotón. En el
siguiente paso por meta Yago se envalentonaba y dejaba a Pelayo, quien era
cazado por Darío, quien a su vez había entrado en el grupo gracias al trabajo
de David. Nuestro chico metido en el grupo sufría un percance por un fortuito
golpe con Fernando González de la E.C. Viella, que hacía que se saliese la
cadena y se descolgara por completo de la carrera. Tras el final se podría ver
la prueba como mayúsculo naufragio de nuestros Infantiles, pero también se
puede dar otra lectura: nuestros chicos, cada uno en sus posibilidades, pese a las
adversidades no se dan por rendidos.
Charles
Terront fue uno de esos intrépidos que comenzaron a darle a los pedales hacia
los años 1876 y 1893, por lo que le cogió de pleno el cambio de velocípedo a
bicicleta y el nacimiento del ciclismo. Ha pasado a la historia por ser el
ganador de la primera París-Brest-París, carrera disputada con una distancia de
mil doscientos kilómetros en la que empleó, tras varios días y sus noches,
setenta y un horas. Y os preguntaréis y por qué esto ahora, pues nuestro amigo
Guti parte este lunes 19 a las 22 horas en una carrera que emula dicha gesta.
Dicha prueba es la Madrid-Gijon-Madrid.
Así
que ¡muchos ánimos Guti!
Os
ponemos los enlaces a las clasificaciones y al álbum de fotos de esta carrera.
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